Empleo y Formación

Actualmente, existen determinados colectivos que se consideran especialmente vulnerables por las dificultades que presentan para acceder a la formación y/o al mercado de trabajo. En muchos casos, estas dificultades vienen precedidas de prejuicios o etiquetas sociales negativas que hacen que estos colectivos suelan ocupar puestos de trabajo poco cualificados y/o muy precarios.

El trabajo y la formación son un derecho social básico, un valor que permite a la persona ser independiente y autónoma, actuar con autodeterminación y sin necesidad de depender de nadie. Estas afirmaciones son las que nos llevan a considerar la inserción laboral como factor clave que permite que una persona pueda actuar con autonomía e independencia, incrementando, también, su participación activa y responsable en la comunidad o medio social en el que vive y convive. Por lo tanto, resulta acertado considerar que los procesos de integración laboral favorecen la integración social de la persona, al igual que una correcta integración social puede facilitar su integración laboral.

En este contexto, los procesos de formación para el empleo promueven mecanismos de actuación claves para la adquisición, desarrollo y potenciación de competencias profesionales; competencias que serán necesarias para dar respuesta a las exigencias del mercado laboral, especialmente aquellas vinculadas a las competencias de empleabilidad y de adaptabilidad, que van a requerir de la persona capacidades para comunicarse, aprender, tomar decisiones, interaccionar con el medio, adaptarse a nuevas situaciones, etc.

El acceso a la formación y al empleo es un derecho. La lucha contra la desigualdad y la exclusión sociolaboral, en pro de la igualdad de oportunidades y de un trato no discriminatorio, es la clave de este proyecto. 

La persona está por encima de sus limitaciones y nuestro trabajo es ofrecerle los apoyos y soportes precisos para que pueda acceder a los procesos formativos, al mercado de trabajo, permanecer en los mismos y desarrollar una actividad formativa y laboral normalizada. Es por ello que, este proyecto se orienta hacia la mejora formativa de un colectivo en situación de vulnerabilidad, que presenta dificultades en relación a sus procesos de integración educativa, laboral y social.

La realidad social de las personas destinatarias es multivariable, así como son variadas las necesidades de intervención. 

Este tipo de necesidades y de especificidades son las que se pretenden atender con el desarrollo de diferentes Itinerarios de Formación para el Empleo mejorando la cualificación de los/las participantes para poder avanzar en el aspecto tanto profesional como personal, favoreciendo ambos ámbitos de manera transversal. Esta cualificación les va a permitir tener más oportunidades de inserción y así poder salir de la zona de riesgo de exclusión social, favoreciendo aspectos personales que también se verán reflejados en la motivación y orientación hacia la búsqueda y/o mantenimiento del empleo.